Página de colección
EKSLencería conceptual de alta costura
EKS nació de mi pasión por los textiles y las texturas refinadas. Estudié diseño de vestuario y teatro en la universidad, y abandoné el mundo escénico para dedicarme al ashtanga yoga en 2006. Tras varios años de introspección, descubrí una visión que compartir con el mundo y, en 2017, comencé a desarrollar esta creación que llamo EKS.
EKS es una abreviatura de la palabra griega Ekstasis (del griego antiguo ἔκστασις “estar o estar fuera de uno mismo, un traslado a otro lugar” de ek- “fuera” y stasis “una posición”, o un enfrentamiento de fuerzas), que encontré al leer la obra de Sartre. Ser y nada (1956): “La causalidad es simplemente la primera aprehensión de la temporalidad de lo ‘aparecido’ como un modo extático de ser... Así, la ambigüedad de la aparición y de la abolición proviene del hecho de que se dan, como el mundo, como el espacio, como la potencialidad y la instrumentalidad, como el tiempo universal mismo, en forma de totalidades en perpetua desintegración”.
Quiero que mis diseños reflejen calidad, atemporalidad y la sensación de “totalidades en perpetua desintegración”.
Utilizo la mayor cantidad posible de materiales naturales. La lencería moderna es una prenda compleja que requiere elasticidad para mayor comodidad y ligereza, y me esfuerzo al máximo para conseguir los mejores materiales disponibles en el mercado. Cada pieza se corta y cose por encargo o se fabrica en pequeñas cantidades, eliminando así el desperdicio de la industria de la moda actual. Utilizo los retales de seda que sobran de las prendas para crear accesorios y dono lo que no puedo usar a otros artistas textiles.
Cada pieza está hecha con amor en Nueva Orleans, Luisiana.
Utilizo la mayor cantidad posible de materiales naturales. La lencería moderna es una prenda compleja que requiere elasticidad para mayor comodidad y ligereza, y me esfuerzo al máximo para conseguir los mejores materiales disponibles en el mercado. Cada pieza se corta y cose por encargo o se fabrica en lotes pequeños, eliminando así el desperdicio de la industria de la moda actual. Utilizo los retales de seda que sobran de las prendas para hacer accesorios y dono lo que no uso a otros artistas textiles.